Descubra los Municipios de la Costa Blanca con sus playas y calas inolvidables, cumbres prelitorales de majestuosa belleza y sol infalible hacen de la Costa Blanca un paraíso a tiempo completo donde residir.
La Costa Blanca es para el público español todavía un lugar de preferencia, así que la demanda por una primera o segunda residencia sigue muy viva. El encanto del paisaje con sus naranjos y almendros es único. La parte norte de la Costa Blanca ofrece una alta calidad de vida con sus ofertas de ocio y de deportes y por fin con su cálido clima mediterráneo durante todo el año. Las playas de arena de varios kilómetros y los impresionantes acantilados son típicos de la Costa Blanca. Entre montañas de pinos se extienden largos valles con campos de almendros, olivos, naranjos y mandarinos. Viejas terrazas de piedra que llegan hasta la cima de la montaña hacen que el paisaje siempre nos sorprenda.
En las fabulosas montañas se puede sentir la naturaleza intacta. Multitud de senderos señalizados nos pueden llevar a unos impresionantes miradores. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el clima de la Costa Blanca como uno de los mejores de nuestro planeta.
El color azul de las cerca de 59 banderas que acreditan la calidad de las aguas de sus más de 200 kilómetros de litoral que se pierden en el mar. Al norte, en la comarca de la Marina Alta, el montañoso paisaje se acerca a la orilla para conformar acantilados y calas irrepetibles que se asoman entre largas playas de arenas finas en Denia Jávea o Benissa. De paso por Benidorm, se encuentran las playas más reconocidas y frecuentadas.
Al sur cambia el paisaje y las calas de corte abrupto se transforman en cordones dunares, sobre todo en Guardamar del Segura, que guían los pasos por humedales y saladares, como las Lagunas de La Mata en Torrevieja o El Hondo en Elche.
Ser la segunda provincia más montañosa de España hace de este territorio un espacio exclusivo en el que pasar de un valle a una cima de más de 1.000 metros en un mismo recorrido –con los 1.550 metros de Aitana y los 1.436 del Puig Campana–, o descubrir vegetación autóctona y única en toda España, además de bosques ya protegidos y ya escasos en Europa, como el de tilos en Sierra Mariola.
Y de la montaña a los valles que miran de soslayo a las montañas que los acunan a más de 900 metros de altura. La Vall d'Alcalà, Vall d'Ebo, La Vall de Laguar, donde se encuentra el abrupto Barranc de l'infern, la Vall de Pop, Vall de Gallinera o el Valle del Vinalopó.
Caminar por su Centro Histórico es descubrir la esencia mediterránea con empinadas callejuelas, muchas de ellas con el encanto de estar todavía empedradas y escalonadas; de las casas que constituyen la zona antigua destaca su color blanco con portales y ventanas que están siempre engalanadas con plantas como el Jazmín, Geranios y Bougainvillea, muy presentes en los pueblos mediterráneos que siempre aportan color y vida.
Callejuelas tranquilas y estrechas, casas blancas que en su tiempo estuvieron protegidas por una sólida muralla, una iglesia imponente con sus características cúpulas azules y unas vistas impresionantes de la costa.
La dieta mediterránea, verduras, frutas, exquisitez, buena cocina, tradición, investigación y profesionalidad. Lo demuestran las diez Estrellas Michelín que cuelgan de seis establecimientos de nuestro entorno.
También se reconoce con los productos que tienen el sello de Denominación de Origen. Ahí está el níspero de Callosa d'En Sarrià, el turrón de Jijona y Alicante, las Cerezas de la Montaña de Alicante, la Uva Embolsada del Vinalopó, las Bebidas Espirituosas de Alicante, los Vinos de Alicante y la Granada Mollar de Elche.
Los Moros y Cristianos, las Hogueras de San Juan o la Semana Santa son reconocidas como celebraciones de Interés Turístico Internacional
No hay rincón ni población, por pequeña que sea, que no celebre alguna fiesta con su propia idiosincrasia. Se llevan la palma los Moros y Cristianos, una tradición extendida por toda la Costa Blanca desde el siglo XVI y que tiene su máximo exponente en los de Busot y los de Alcoy, localidades donde esta fiesta ha sido declarada de Interés Turístico Internacional.